Bienvenidos

Viaje al mundo literario narrativo y poético de este escritor a través de toda su obra.



miércoles, 29 de diciembre de 2010

Felices fiestas de fin de año

Nada mejor que terminar el año con algunos de los fragmentos de la obra Largo ha sido este día de nuestro autor. Además una foto suya para que empiecen a conocerlo.



"Así, por el espejo de los juegos, las mujeres, las muertes, los asombros, y el saboreo de los nísperos, me fui metiendo en la materia cienaguera y caribe de los mitos y de tanto abandonarme a los ímpetus oscuros de esa poesía feroz y delicada, soñadora y errante, se me fue perdiendo el alma en un periplo antillano que marcaría para siempre mi espíritu. El mar me hizo a su aire." (p. 16)

"Muchos y grandes ríos hay en el mundo: el de la vida, el del amor, el de la gracia. Pero el de la nostalgia es un río lento, impasible, sin colores (y, sin embargo, hay azules que tienen el sabor de la nada), sin caídas, sin rápidos, con remansos, con
brisas, imprevisible, traicionero y siempre peligroso de vadear en la noche. Un sol blanco, un sol que parecía una lentejuela de nieve en la neblina goteaba sobre los tejados de la ciudad hostil aquella tarde en que fui a verlo a esa clínica donde aguardaba la muerte con la misma resignación desesperada con la que últimamente había venido aguardando tantas cosas en una tierra en la que se sintiera desde siempre un extraño." (p. 17)

"Pronto caería la noche, la ciega noche azul, sobre los tamarindos y con esa morosidad siniestra con que volaban chillando casi a ras de la arena los pájaros costeros, una sombra que sí sabía de sombras y que tenía el olor de la ceniza mojada se apoderaba de mi espíritu y yo era ese estallido de silencio y ese enorme vacío. Pero era un miedo hermoso." (p. 240)

lunes, 4 de octubre de 2010

Objetivos del análisis de la obra de Crespo

Los objetivos buscan mostrar la importancia de la obra literaria de este autor para la literatura nacional colombiana e internacional y en especial, a partir de su autobiografía Largo ha sido este día en la que expone aspectos sociales, culturales e históricos de la región de nacimiento de este autor. Es importante destacar los elementos más sobresalientes de este autor en relación con su construcción autobiográfica y la influencia de aspectos como el tiempo y la memoria y, por tanto, de la comprensión de su texto. Colombia es un país, con un gran número de escritores, algunos de sobrada creatividad e intelectualidad y otros, hechos en el simple boom de los temas mercantiles tan comunes en todas partes del planeta. Para mí es importante rescatar el buen escribir de un escritor que ha sido olvidado por muchos grupos literarios nacionales que están dominados por ideologías políticas o económicas. Si no se escribe como ellos quieren, no puedes estar en sus grupos y me llama muchísimo la atención encontrar en Crespo esa rebeldía por evitar ser encasillado dentro de estos grupos. Crespo es un escritor con un bagaje cultural bastante amplio, es un hombre que respeta lo clásico, el buen escribir, sin que con ello quiera decir que no admita los cambios que se van dando, pero que quiere que no se pierda la esencia de la literatura. Para él, la literatura no es negocio, es un asunto más serio que debe reflejar aspectos menos superficiales. Y es así como debería ser, la literatura es reflejo de lo que somos. Les invito a leerle.

martes, 7 de septiembre de 2010

La construcción del Yo a través del tiempo y la memoria en la autobiografía "Largo ha sido este día"

Voy a empezar un recorrido más profundo del texto Largo ha sido este día, a partir del estudio de la presente bibliografía. Además en próximas publicaciones buscaré explicar algunos de los capítulos de mi trabajo de suficiencia investigadora, de manera que haya una comprensión y un acercamiento al autor José Manuel Crespo.


BIBLIOGRAFÍA CON RESPECTO AL AUTOR JOSÉ MANUEL CRESPO


CRESPO, José Manuel. (1978). Basuras del tiempo muerto. Bogotá: Unión Gráfica.
CRESPO, José Manuel. (1981). Qué será de Paola Silvi. Bogotá: Unión Gráfica.
CRESPO, José Manuel. (1984). La promesa y el tiempo. Bogotá: Tercer Mundo.
CRESPO, José Manuel. (1987). Largo ha sido este día. Bogotá: Plaza y Janés.
CRESPO, José Manuel. (1988). Ánimo contra el miedo. Tunja: Talleres gráficos de la Caja Popular Cooperativa Ltda.
CRESPO, José Manuel. (1991). “Página de Poesía”. Magazín Dominical El Espectador, Nº 435, Agosto 25:11.
CRESPO, José Manuel, Carlos Corsi y Edgar Gonzáles. (1997). El Estado Auténtico. Bogotá: Colección Nueva Imagen.
CRESPO, José Manuel. (1997). “Inéditos de José Manuel Crespo”. Magazín Dominical El Espectador, Nº 726, Abril 13:13.
CRESPO, José Manuel. (1998). Considéralo un sueño. Bogotá: Magisterio.
CRESPO, José Manuel. (1999). “Fuga con un noble”. Magazín Dominical El Espectador, Nº 822, Febrero 14:14-15.
CRESPO, José Manuel. (2001). “Ulises, hombre solo”, Casa Silva, Nº 14: 139-140.
CRESPO, José Manuel. (2002). “Ulises, hombre solo”, Hojas universitarias, Nº 51:146-150.

BIBLIOGRAFIA SOBRE LITERATURA COLOMBIANA:

AYALA POVEDA, Fernando. (1990). Manual de Literatura Colombiana. Bogotá: Educar editores S.A.
HOLGUÍN, Andrés. (1974). Antología Crítica de la poesía colombiana. Bogotá: Biblioteca del Centenario del Banco de Colombia. Pp. 274-275.
NORIEGA, Teobaldo. (2001). Novela colombiana contemporánea: incursiones en la postmodernidad. Madrid: Pliegos.
PINEDA BOTERO, Álvaro. (1990). Del mito a la posmodernidad. Bogotá: Tercer Mundo.
PINEDA BOTERO, Álvaro. (2005). Estudios críticos sobre la novela colombiana 1990-2004. Medellín: Universidad EAFIT.
WILIAMS, Raymond. (1991). Novela y poder en Colombia. Bogotá: Tercer mundo.

BIBLIOGRAFÍA SOBRE ARTÍCULOS RELACIONADOS CON JOSÉ MANUEL CRESPO:

AMAYA MÉNDEZ, Nelly R. (2001). “Bogotá literaria”, Boletín cultural y bibliográfico Vol. XL, Nº 62: 149-150.
CASTRO, Gabriel A. (1999). “Ciudad, sueño e historia”, Magazín Dominical El Espectador, Nº 828, Marzo 28: 15.
ECHAVARRÍA, Rogelio. (1995). Mil y una notas. Bogotá: Instituto Caro y Cuervo, p. 236.
ESLAIT RUSSO, Elías. (2003). “Crespo o el placer de perseguir la nostalgia”, Discurso pronunciado en Ciénaga, Colombia, enero 17. (Cortesía del autor).
GOMEZ-LEÓN, O. (1985). “La promesa y el reino, o la verdad como mentira”, La República, Julio 14:12.
HERRERA, Carlos. (1998). “Nunca he perdido el contacto con Ciénaga”. El Nuevo, Febrero.
PINEDA BOTERO, Álvaro. (1987). “La Biblia Cienaguera”. El Heraldo. Agosto 30: 6.
“Política, polícia e palavras encantadas”. (1998). Liberal, novembro 11: 3
RAMÍREZ C, Clinton. (1993). “Lectura al revés de un solo hombre”. Discurso pronunciado en Ciénaga, Colombia, enero. (Cortesía del autor).
RAMÍREZ C, Clinton. (2001). La Aldea Invisible. Barranquilla: Tipografía Unión Ltda.
RAMÍREZ, Dora C. (1988). “Larga lectura ha sido”, Boletín cultural y bibliográfico, Vol. 23, Nº 15: 167-168.
RESTREPO, Carlos J. (1986). “El cielo cálido y los infiernos gélidos”, Boletín cultural y bibliográfico, Banco de la República Vol. 23, Nº 6: 85-86.
RESTREPO, Gabriel. (1999). “Una fiesta del lenguaje”, Discurso pronunciado en Bogotá, octubre 20. (Cortesía del autor).
VARGASCARREÑO, Hernán, (2005). “Ulises, hombre solo: o el viaje a las pálidas cavernas donde nace el desamparo”. El informador de Santa Martha. Febrero: 4.

BIBLIOGRAFÍA SOBRE AUTOBIOGRAFÍA:

BRUSS, Elizabeth. (1991). “Actos literarios”. Suplementos Anthropos 29, 62-78.
CAMPRA, Rosalba. (2000). “El ‘yo’ de la crítica entre autobiografía y ficción”. Río de la Plata, 20-21, 91-106. Actas del VI congreso.
CATELLI, Nora. (1986). El espacio autobiográfico. Barcelona: Lumen.
EAKIN, P.J. (1991). “Autoinvención en la autobiografía: el momento del lenguaje” Suplementos Anthropos 29:79-92.
GUSDORF, George. (1991). “Condiciones y límites de la autobiografía”. Suplementos Anthropos 29: 9-17.
IZUZQUIZA, Ignacio. (1983). “Apuntes biográficos: J.D. García Bacca, datos para una biografía elemental”, Anthropos Nº 29/30: 19-22.
LEJEUNE, P. (1991). “El pacto autobiográfico”. Suplementos Anthropos 29: 47-61.
LOUREIRO, Ángel. (1991). “Problemas teóricos de la autobiografía”. Suplementos Anthropos 29: 2-6.
NOUZEILLES, María Gabriela. (1994). “El inverosímil autobiográfico”. Coloquio internacional: el texto latinoamericano. Universidad Poitiers-Madrid: Fundamentos. Pp. 99-105
OLNEY, J. (1991). “Algunas versiones de la memoria/Algunas versiones del bios: la ontología de la autobiografía”. Suplementos Anthropos 29: 33-46.
POZUELO Y., José M. (2006). De la autobiografía. Teoría y estilos. Barcelona: Crítica.
PUERTAS M., Francisco E. (2004). Aproximación semiótica a los rasgos generales de la escritura autobiográfica. La Rioja: Universidad de la Rioja.
RENZA, Louis A. (1977). “The veto of the imagination: a theory of autobiography”. New Literary History, Vol. 9, No. 1. The Jhon Hopkins University press.
ROSA, Nicolás. (1990). El arte del olvido (sobre la autobiografía). Buenos Aires: Punto Sur.
SPRINKER, M. (1991). “Ficciones del yo: el final de la autobiografía”. Suplementos Anthropos 29:118-128
WEINTRAUB, Karl. J. (1991). “Autoconciencia y conciencia histórica”. Suplementos Anthropos 29:18-33.

BIBLIOGRAFÍA SOBRE NOVELA LÍRICA, MEMORIA Y OLVIDO, AYUDAS AL MARCO TEÓRICO:

AUGÉ, Marc. (1998). Las formas del olvido. Barcelona: Geodisa.
BENVENISTE, É. (1979). Problemas de lingüística general I. México: Siglo XXI.
FREEDMAN, Ralph. (1972). La novela lírica. Barcelona, Ed. Barral.
GENETTE, G. (1989). Figuras III. Barcelona: Lumen.
KOHUT, Karl. (2004). “Literatura y memoria”. Istmo: Revista virtual de estudios literarios y culturales centroamericanos 9, Julio- Diciembre.
LÉVI-STRAUSS, C. (1964). El pensamiento salvaje. México: Fondo de cultura económica.
LLEDO, E. (1970). Filosofía y lenguaje. Barcelona: Ariel.
RADLEY, Alan. (1992). “Artefactos, memoria y sentido del pasado”, en D. Middleton y D. Edwards (comp.), La naturaleza social del recuerdo y del olvido. México, Ed. Paidos: 63-77.
RICOEUR, Paúl. (1999). La lectura del tiempo pasado: Memoria y Olvido. Madrid: Universidad Autónoma de Madrid.
TACCA, Oscar. (1985). Las voces de la novela. Madrid: Gredos.
VILAS-MATA, Enrique (1994). Recuerdos inventados. Barcelona: Anagrama.
VILLANUEVA, Darío. (1983). La novela lírica. Madrid: Taurus, tomos I, II.
OTRA BIBLIOGRAFÍA:
DORSCH, Friedrich. (1985). Diccionario de psicología. Barcelona: Herder.
ESTÉBANEZ C., Demetrio. (1998). Diccionario de términos literarios. Madrid: Alianza.
FERRATER M. José. (1984). Diccionario de filosofía. Madrid: Alianza.
MOLINER, María. (2007). Diccionario del uso del español. Madrid: Gredos.

lunes, 26 de julio de 2010

Algunas citas textuales de "Largo ha sido este día"

En su texto José Manuel Crespo muestra su lado más poético:

"Es lo que siento ahora que regreso de lo extraño a la patria (a esta patria cerrada en la que vengo a ser el extranjero, el otro, el olvidado) a buscar en el viento de la promesa los frutos bendecidos por la luz, el vino hecho con uvas de las del paraíso, la palabra. Después de haber vivido en el más profundo centro de lo extraño y de sentirme abismalmente separado de mi reino secreto, he regresado en el atardecer, la más sellada de mis horas, la hora en que los campesinos van volviendo a sus casas por los barbechos y los caminos lentos y el rojo sol toca los ríos que nos recuerdan y señalan la presencia de la tierra y por las ramas de los tamarindos se siente el viento que se aleja hacia el amargo país de lo que ha sido pero que todavía no ha dejado de ser." (85)

Describe su casa, creando un mundo propio:

"En esta casa, en este espacio íntimo que la tierra nos diera para que los espíritus de la luz y del sueño se conocieran con nosotros y tuvieran su pleno crecimiento esos seres que sólo aquí hubieran podido encontrarse con su propio destino, se fueron desvelando ante mis ojos la incertidumbre y el asombro de presentir que la tierra no sólo nos traía los ángeles huraños sino (¡quién lo creyera!) que ella misma era el ángel que abría y que cerraba y que abría las cuatro fuentes del paraíso. Aquí se hizo realidad para nosotros (la menos numerosa de las familias de la más reducida de las tribus perdidas) ese espacio encantado que hizo posible nuestra historia. La tierra nos dio casa y la casa un destino." (44)

viernes, 23 de julio de 2010

Largo ha sido este día


Esta autobiografía se divide en seis capítulos y cada uno empieza con un epígrafe que es siempre una máxima del autor norteamericano de comienzos del siglo XX, Scott Fitzgerald ; es una obra autobiográfica que describe los primeros años de vida del escritor, quien utilizando de manera magistral una prosa lírica involucra las historias vividas cronológicamente a finales de la década de los años 40 y comienzos de la década del 50. El autor hace una descripción del lugar sobre el cual centrará toda su autobiografía, su casa y todo el pueblo de Ciénaga, plasmando así la idiosincrasia de los pueblos y caseríos de la zona norte de Colombia, al lado del mar Caribe e incluyendo personajes familiares como su madre, su padre, sus abuelos, etc., y dando prioridad a otros afines a su niñez como la India Marina. De igual manera hace referencia a personajes del pueblo los cuales, a través de su voz, relatan historias que se conjugan con su imaginación, detallando así sucesos históricos importantes para la vida nacional y local, además de hechos míticos, culturales y religiosos contados con excelente uso del lenguaje. Mezcla el pasado, el presente y el futuro, lo que fue, lo que es, y lo que posiblemente será. Su memoria involucra recuerdos propios y colectivos de los orígenes y evolución del pueblo. Crespo regresa siendo adulto a su pueblo natal, y empieza así a escribir esta autobiografía reflexionando y recordando, mientras siente y observa los lugares de su niñez.
En general, el capítulo I expone situaciones como la muerte de su padre, las calles polvorientas del pueblo; describe acciones como la llegada al pueblo de Ciénaga de un prestidigitador, la creencia en la fantasía, y la ilusión de los ignorantes; refleja la inocencia de su niñez, la magia del tiempo, las historias que cambian la realidad en maravilla como la que expone en la página once del texto sobre el pan y las monjas. Encontramos relatos de caballos de ocho patas y mariposas de seis alas, la devoción de los fieles a la iglesia, la creencia en los santos, habla de hombres sabios que saben leer los signos de la naturaleza y por quienes se observa en su escribir una gran admiración, cuenta historias que se vivieron en diferentes casas de la aldea haciendo extrema descripción en los detalles que la componen.
En el capítulo II Crespo se centra en sus recuerdos, lo que sentía al caminar, mirar y pasar por diferentes sitios con los cuales descubría recuerdos anidados en su alma, nos poetiza sobre la sabiduría popular, las inquietudes de su infancia, hace reflexiones y nostalgias sobre los hechos que le rodearon; históricamente hace referencia, entre otras, a la guerra de los mil días y a la masacre de las bananeras.
En el capítulo III los recuerdos están centrados en el patio de su casa y en los relatos contados por Nicolás Granados, un amigo de su abuelo; revive sus ocho años de edad, busca el sentido de la vida, habla de Ciénaga como pueblo, como lugar, hay disertaciones sobre lo que es el tiempo, los sueños, la niñez y los recuerdos mismos.
En el capítulo IV muestra las historias y discernimientos de Alejandro Amarales sobre la religión y algunos otros personajes de la aldea; empieza la historia de los Sectarios, un grupo religioso que tuvo mucha influencia en la comunidad de Ciénaga; a través de sus personajes se cuestiona sobre la vida y el tiempo. Al final relata la vida y muerte de un caudillo que existió varias décadas antes de su nacimiento (personaje construido a partir de caudillos reales como Anacreonte González y César Riascos, símbolos del poder político y del latifundio de la época) y se observa la habilidad del autor para poner en boca de otros los recuerdos, como lo hace con un discurso dado por el caudillo en mención.
En el capítulo V continúa con la historia sobre los Sectarios, explica en que creían y no creían los cienagueros, escribe sobre la muerte de su abuelo, la historia nacional, la religión, y casi todo lo acontecido con un personaje que existió en Ciénaga al cual llama el Vidente o el hombre de harapos con broche de zafiros, que aparece para la década de los 50 e inicia todo un movimiento social.
En el capítulo VI empieza a detenerse en el anochecer y se despide del lugar al cual había llegado al atardecer.

CRESPO, José Manuel. (1987). Largo ha sido este día. Bogotá: Plaza y Janés.

domingo, 27 de junio de 2010

Biografía José Manuel Crespo




José Manuel Crespo nace en Ciénaga, el 29 de mayo de 1942, hijo de José Manuel Crespo Labarcés y Elisa Campo Reguillo. Tiene dos hermanas: Sara María y Elisa Ester. Sus primeros 10 años transcurren en Ciénaga, lugar que será recordado toda la vida por el autor y a la que dedicará algunas de sus obras, entre ellas la que centra el presente trabajo. Al lado de una naturaleza llena de sonido, olores y colores aprende a valorar desde muy niño los pequeños detalles que llenan su vida, incluyendo la literatura oral que le llega de familia y amigos. Por situaciones familiares se instala en Bogotá hacia el año 1953. Allí muere su padre de un cáncer, siendo ésta una situación de marcada incidencia en la vida de nuestro autor ya que es de su padre de quien hereda el gusto por la literatura y la historia y fue además quien intuyó su vocación literaria. Luego vive un tiempo en la región de Boyacá, lo que le hace posible asimilar una cultura muy diferente en cuanto a las costumbres y estilo de vida a la de la Costa Atlántica, para luego, regresar nuevamente a Bogotá. En lo personal, se casa en el año 1977 con la bogotana María Mercedes Vargas y tiene tres hijos: Angélica Natalia, José Manuel y María Cristina. En lo intelectual, estudia su secundaria y el bachillerato en diferentes colegios, en los cuales se consideró bueno para algunas materias y pésimo para otras. Siempre estuvo enamorado de la poesía y desde muy joven empezó a escribirla. Ha ejercido cargos como funcionario público y de divulgación y prensa, pero siempre ha dedicado lo mejor de su esfuerzo al trabajo literario. Nunca ha sido un escritor tradicional, incluso se considera un desterrado de los grupos literarios por no seguir sus esquemas y reglas pues cree que la literatura no puede estar sujeta a ideologías o políticas. Encuentra inspiración en su vida, en lo cotidiano, la naturaleza, las leyendas, lo urbano, lo rural. En sus obras despliega todo su conocimiento de historia, religión, mitos, leyendas, botánica y literatura.
No ceja un instante en la búsqueda de la verdad en todas las formas de la vida. Hombre de cultura universal, recorre con pasión los caminos de la historia, el arte y la literatura. Es un estudioso de la literatura y un crítico constructivo. Tiene preferencia por poetas españoles como Antonio Machado, Francisco de Quevedo y Luís Cernuda, e iberoamericanos como Rubén Darío, Cesar Vallejo, Octavio Paz y Leopoldo Lugones, entre otros, de quienes dice de memoria poemas enteros; en narrativa su gusto es variado pues siendo un autodidacta ha leído autores de toda la literatura universal que le han influenciado e inspirado como Albert Camus con sus ensayos El hombre rebelde y El mito de Sísifo y, con sus novelas La caída y La Peste que de alguna manera le crearon cuestionamientos sobre los conflictos humanos y le dieron una idea de la narrativa como ideología. También autores que le aportaron una visión de los conflictos universales como Hermann Hesse con su obra El lobo estepario, Marcel Proust y su obra En busca del tiempo perdido, y Virginia Woolf con Las olas y Al faro, entre otros. El primer autor latinoamericano que leyó fue Rómulo Gallego con obras como Canaíma y Doña Bárbara, y después otros como Jorge Icaza, Ciro Alegría y José María Arguedas, quienes mostraron que era posible narrar acciones que se van ligando con el fenómeno histórico. De igual manera ha leído autores significativos que lo han relacionado con el contexto literario e histórico de Ciénaga, que vale la pena mencionar. Entre ellos estarían, Luís Capella Toledo (1838-1896), nacido en Santa Marta (fue presidente del Estado soberano del Magdalena), quien escribió Leyendas históricas, una obra publicada en Bogotá en 1879, donde, entre otras cosas, relata la batalla ocurrida en mayo de 1813 en Ciénaga entre realistas y separatistas. Otro sería José Francisco Socarrás, quién, aunque nacido en Villanueva, Cesar (1907), se radicó en Ciénaga en los años treinta y escribió Viento de trópico (1961), un libro de cuentos donde figuran relatos como “Contrabandistas” y “La uña de la gran bestia”, relacionados con Ciénaga y con la Zona bananera del Magdalena. Una mención especial merece Álvaro Cepeda Samudio, quien nació en Barranquilla en 1926 y murió en Nueva York en 1972. Vivió toda su niñez en Ciénaga donde escribió La casa grande, una novela sobre la masacre de las bananeras. Es autor, además, de Todos estábamos a la espera (1954), un libro de cuentos que algunos consideran como el punto inicial de la moderna narrativa colombiana.
Retomando a Crespo, entre sus libros de poemas destacan: Sinfonía vertical (1963); Catarsis (1966); Adoración del fuego (1973), ganador del premio nacional de poesía “Guillermo Valencia” de Colcultura; Ciudad del horizonte (1975); Talud (1976); Coros en la neblina (1993); Ulises, hombre solo (2004), premio nacional de poesía. Sus obras en prosa: el ensayo político-literario Basuras del tiempo muerto (1978); la obra histórico-política realizada para el Senado de la República junto con, Carlos Corsi Otálora y Edgar González Silva, El Estado auténtico (1997) y las obras: Qué será de Paola Silvi? (1981); La Promesa y el reino (1984); Largo ha sido este día (1987); Ánimo contra el miedo (1988); Considéralo un sueño (1998). Actualmente tiene terminada otra obra, la cual está organizando para publicar.
Crespo ha sido un escritor destacado tanto en el ámbito de la poesía como en el de la narrativa. Su trayectoria como poeta se ha hecho presente en algunas antologías nacionales como en la de Andrés Holguín Antología Crítica de la poesía colombiana (1974), y su obra narrativa en textos investigativos como los de Álvaro Pineda Botero Del mito a la posmodernidad (1990) y Estudios críticos sobre la novela colombiana 1990-2004 (2005), además, es citado en trabajos de investigación literaria como el de Raymonds Williams Novela y poder en Colombia (1991).
Pertenece a una generación de escritores, poco estudiados y relativamente desconocidos fuera del país. Salvo referencias y comentarios, como los de Elías Eslat Russo, Clinton Ramírez, Gabriel Restrepo, Hernán Vargascarreño, entre otros, no existen trabajos amplios sobre la obra de Crespo. Algunas de sus poesías y ensayos, además de comentarios a sus obras han salido también en artículos periodísticos en Colombia y Brasil .

jueves, 24 de junio de 2010

José Manuel Crespo y su obra literaria






Por fin, después de varios años presento la defensa el 30 de junio de mi suficiencia investigadora del Doctorado en Literatura y Ciencia literaria con la Universidad del País Vasco: "La construcción del yo a través del tiempo y la memoria en Largo ha sido este día de José Manuel Crespo". Investigación literaria que pretendo plasmar en este blog como una manera de dar a conocer la obra de este magnífico escritor colombiano.